sábado, 15 de septiembre de 2012

Freud a la chilena

 
Chile es pionero en el continente americano (y esto incluye a los Estados Unidos) en lo que a psicoanálisis se refiere. Corría el año 1910 y en Buenos Aires se celebraba el Congreso Internacional Americano de Medicina e Higiene. El médico chileno Dr. Germán Greve Schlegel hacía su comunicación que llevaba por título: Sobre psicología y psicoterapia de ciertos estados angustiosos. Esta presentación que no apareció publicada en ninguna revista de difusión científica y que no tuvo ninguna repercusión ni en Chile ni en Argentina, es el primer trabajo de investigación psicoanalítica en español. Freud (que sabía leer en español) lo revisó y quedó muy satisfecho con el escrito. Luego Freud escribió:

“Le agradecemos al colega, probablemente alemán, en el lejano Chile por la apreciación imparcial del psicoanálisis y la inesperada confirmación de su efecto terapéutico en países extranjeros”.

Pueden ver cómo Freud también se equivocaba, el Doctor Greve era chileno, aunque tenía ascendencia alemana. Más tarde, en su escrito Contribución a la historia del movimiento psicoanalítico de 1914, Freud lo vuelve a mencionar:

“Un médico de Chile (probablemente alemán) se pronunció en el congreso internacional que sesionó en Buenos Aires, en 1910, en favor de la sexualidad infantil y encomió los éxitos de la terapia psicoanalítica en el caso de los síntomas obsesivos.”

Es un orgullo el hecho de que Freud cite a un médico chileno en dos oportunidades y más aún, en un escrito tan importante como es Contribución… (1914). Hay que decir que el  Doctor Greve no era un aficionado, era un analista en todo el sentido de la palabra. Tenía su consulta particular ubicada en la calle Agustinas #1954, en pleno centro de Santiago. Ahí se encontraba su hogar, su estudio y su diván.

Freud y Greve se conocieron en Europa y mantuvieron una nutrida correspondencia que aún no se ha publicado. Todavía no se hace un estudio detenido de este singular médico chileno, cuyo interés por el psicoanálisis es sólo un capítulo de su pasión por la ciencia.   

Descarga la histórica comunicación presentada en Buenos Aires por el Dr. Greve aquí

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